Un Día lleno de Lecciones

Me queda menos de dos días para el siguiente ciclo y siento que no he aprovechado lo suficiente estas últimas dos semanas. Llevo unos días de bajón, triste y con el nudo en la garganta de la primera fase. Quizás se deba en parte a mi asistencia el pasado 27 de febrero a una jornada de puertas abiertas dirigida a pacientes con cáncer de mama. No es que fuera una experiencia negativa, todo lo contrario, pero fue dura y hubo momentos en los que me sentí retroceder a los comienzos de la enfermedad sin poder evitar emocionarme y peor aún sentir de nuevo pánico a la recaída cuando todavía ni siquiera me he curado.

El día empezó muy temprano, me curtí bien de crema, maquillaje, rimel, colorete ... y me vestí elegante envuelta en la frágil burbuja de felicidad y optimismo que mucho me ha costado prefabricarme y cuya coraza no he reforzado aún si es que algún día lo consigo. Una vez allí, me tuve que enfrentar a datos como los siguientes.

"Una de cada ocho mujeres presentará cáncer de mama a lo largo de su vida."
"Su incidencia en España es de unos 40 casos por cada 100.000 habitantes y año."
"7-10% de los CM son hereditarios"
"El CM es la segunda causa de muerte en pacientes entre 35 y 54 años."
"El linfedema es una inflamación crónica."

Otros eran más alentadores.

"De todos los casos sólo del 7-10% presentarán metástasis al diagnóstico."
"La tasa de supervivencia a los 5 años, con el tratamiento apropiado se acerca al 95%, en los estadios más bajos, por eso la importancia del diagnóstico precoz."
"Hoy en día cáncer no es sinónimo de muerte."

Estas sólo fueron generalidades. Nos dieron información sobre hábitos de vida saludables que publicaré en breve y que según estudios demostrados disminuyen el riesgo de CM en un 30 o 40% por su efecto protector, sin olvidar la conservación y cocinado de los alimentos. Medicina complementaria como la acupuntura. Intervención psicológica. Tratamiento rehabilitador. Consejos estéticos. Mensajes que emiten los medios de comunicación que a veces ayudan y otras confunden. En fin, un montón de información que iré dosificando y espero resulte útil.

El día fue especial no sólo por lo que aprendí y reviví sino también porque fue una jornada de encuentro y reencuentro. Conocí "face-to-face" a Montse, alguien que sabe muy bien lo que es la enfermadad, que me ha dado información muy valiosa y sobre todo muchos ánimos que siempre agradeceré. La primera vez que hablé con ella por teléfono su voz, sus frases estaban cargadas de dulzura, optimismo, naturalidad y mucha fuerza. Cuando a sus palabras pude añadir su amplia y jovial sonrisa, el resultado no pudo haber sido mejor. Y después vino el reencuentro con alguien con quien compartí mucho hace ya bastante tiempo. Nos reímos juntas infinidad de veces, intercambiamos confidencias, nos ayudamos, nos defendimos, nos enfadamos, y también nos distanciamos, pero sin olvidarnos la una de la otra y sin necesidad de echarnos en cara esta separación que deberíamos haber evitado, volvimos a reiniciar el ciclo en una sobremesa como las de antes en la que los viejos y los nuevos tiempos se entremezclaron.